Luchaba por no sentirse suficiente

Soy una sobreviviente de abuso sexual infantil. Mi experiencia ocurrió hace 60 años, cuando tenía cuatro. El poder de la vergüenza, la culpa, el bochorno y la baja autoestima me ha controlado toda mi vida.

Durante toda mi vida he luchado con no ser suficiente. Sentía que tenía que ser perfecta para encajar. He utilizado la disociación toda mi vida. Me he quedado paralizada en el tiempo sin poder moverme.

En 2017, una amiga me habló del Retiro Saprea. No dejaba de pensar en solicitar ir al retiro y finalmente me puse en contacto con ellos y me inscribí para ir. Me puse muy ansiosa después de inscribirme. Por fin llegó el día de asistir y estaba ansiosa por conocer a las demás mujeres.

Cuando me instalé, conocí a algunas de las mujeres más increíbles, mucho más jóvenes que yo. Formé un vínculo tan fuerte con estas mujeres que nadie podrá romper. Asistir al retiro fue la primera vez que hablé de mi abuso sexual. Me comprendieron y escucharon de verdad.

Estoy muy agradecida por haber tenido la oportunidad de asistir al Retiro Saprea. Me enseñó a quererme de verdad y a pedir lo que necesito. Aprendí nuevas herramientas y estrategias que me ayudarán en mi jornada. Me queda mucho camino por recorrer para sanar, ya que acabo de empezar mi jornada.

-Jenefer, Sobreviviente