No podría estar más orgullosa

Cada uno tiene su propia historia. Algunas son parecidas, otras diferentes… ¡pero al fin y al cabo siguen conectándonos a nosotros, los sobrevivientes! Nuestras historias no nos definen, y nunca deben compararse.

La mía empezó en el instituto, durante mi penúltimo año. Por fin empecé a salir al mundo de las citas y tuve mi primera relación de verdad. «Viva yo», pensé. Cierto… no. Aquel chico acabó traicionándome, traicionando mi confianza y traicionando mi inocencia. Después de ser agredida sexualmente, sinceramente no sabía qué hacer. Lo mantuve en secreto durante muchos años. No tenía mucha fuerza, amor propio ni confianza. Estaba acostumbrada a que me manipularan, controlaran y degradaran… entre otras cosas.

Tras soportar múltiples relaciones emocional y mentalmente abusivas, descubrí Saprea y su Retiro. Un refugio seguro para mujeres que sufrieron abuso sexual de niñas o adolescentes. Para ser sincera, ni siquiera sabía que existía un lugar así. Pero déjame decirte que ¡fue como un sueño!

Asistí al Retiro Saprea, en Utah, en noviembre de 2019, y fue, la experiencia más increíble que he podido vivir y que me ha cambiado la vida. Desde el entorno hasta la comida, pasando por toda la gente increíble. No podría haber pedido una forma mejor de empezar mi jornada de sanación. Estar en ese hermoso espacio hizo que todas y cada una de nosotras nos sintiéramos tan seguras. Ahora tengo hermanas de todo el mundo, mujeres que me comprenden, me empoderan y confían en mí. Hicimos tantas actividades increíbles juntas, ¡pero mi favorita tendría que ser el kintsugi! Rompí un tazón, lo recompuse, lo hice más fuerte, único, ¡y lo hice aún más hermoso! La belleza no tiene límites, las imperfecciones nos hacen bellos, porque la verdad es que… ¡nadie es perfecto! ¡Lloré, aprendí, crecí, amé y me liberé de toda esa negatividad en mi vida! Oro para que otras sobrevivientes puedan experimentar la sanación mágica del Retiro Saprea.

Debo decir que viajar sola por primera vez me daba miedo, pero lo superé y aprendí mucho sobre mí misma. Superé muchos obstáculos y, sinceramente, ¡no podría estar más orgullosa de mí misma y de la hermosa mujer que soy hoy!

Muchas gracias por esta increíble oportunidad, a los increíbles fundadores y a todos los maravillosos donantes que hacen posible Saprea y el Retiro. ¡Están cambiando vidas de verdad!

«Creo en ser dueña de mi historia y en amarme a mí misma durante el proceso». Gracias por permitirme compartir mi historia.

-Laura, Sobreviviente