Skip to main content

Saprea > Survivor Stories > Ir al Retiro fue la mejor decisión

HISTORIAS DE SOBREVIVIENTES

Ir al Retiro fue la mejor decisión

 ;

He estado contemplando cómo decir esto y qué escribir, así que aquí va:

Llené una solicitud para el Retiro Saprea, me armé de valor, miré al miedo a los ojos y cambié mi vida para siempre. Cuando todo esto empezó, ya estaba durmiendo poco o nada entre las preocupaciones, las noches en vela, la ansiedad, los pensamientos y los miedos que entraban y salían de mi mente. Ya estaba en el avión, así que no había posibilidad de dar marcha atrás. Llegados a este punto, estaba decidida -muerta de miedo-, pero decidida, al fin y al cabo.

Cuando las ruedas del avión tocaron la pista, me entró el pánico. De repente se hizo real y las emociones me golpearon como un tren de carga. De repente hizo mucho calor en el avión y me entraron náuseas (como si viajar no me produjera ya suficientes náuseas). Bajé del avión, respiré hondo y me dije: «¡Puedes hacerlo! Tú puedes, chica». Estaba petrificada por lo que me depararían los 4 días siguientes.

Iba a estar en un lugar en el que nunca había estado y rodeada de gente que nunca había conocido. No quería hacerlo. Simple y llanamente. Pero seguí adelante. Pensé que, aunque sólo fuera eso, podría seguir adelante y acabar de una vez y volver a casa. Lo que aprendí no sólo fue una sorpresa para mí, sino un verdadero regalo y una bendición.

Llegué sin conocer a un alma allí y aterrorizada por todo. Y me fui con una enorme familia de hermanas fuertes, valientes y maravillosas, ¡a las que sentí como si hubiera conocido toda mi vida! Perdí mucho de niña; todas lo perdimos. Y ahora he ganado tanto. Estaba acurrucada en este precioso lugar, rodeada de tantas desconocidas y en un lugar extraño, pero nunca me había sentido tan segura y cuidada.

Ir a este retiro fue la mejor decisión que he tomado en mi vida. Ha sido lo más duro, valiente, difícil, gratificante, empoderador, edificante y validador que he hecho en mi vida. A las personas que trabajan para Saprea y que han hecho realidad este increíble retiro para todas las que asistimos, quiero decirles, en mi nombre y en el de todas mis nuevas hermanas… ¡GRACIAS!

Gracias por mantenernos al mismo nivel que ustedes y no tratarnos como si fuéramos pedazos de cristal rotos y frágiles. Gracias por no tenernos lástima ni hacernos sentir como si fuéramos menos dignas que ustedes. Gracias por dedicarnos su tiempo, sus cuidados, su amor genuino y su afecto. Cualquiera puede ofrecer un hermoso lugar donde alojarse y comodidades; pero hace falta alguien con un corazón especial y mucho amor para asegurarse de que todas los implicadas se sientan acogidas, cuidadas y ¡SEGURAS!

-Allyson, Sobreviviente